Comienza
el curso 2013/2014 y las aulas siguen sin contar con la mayoría de
los 5.700 profesores que el año pasado fueron expulsados de sus
centros educativos. Porque a pesar de los supuestos esfuerzos
realizados desde el gabinete aún dirigido por doña Mar Moreno, en
BOJA siguen suprimidas 4.502 plazas docentes. Asimismo, todo indica a
que la Junta está incumpliendo su promesa de cubrir todas las
jubilaciones confirmadas a día de hoy, puesto que ya nos han llegado
noticias de institutos con plazas vacantes que, de momento, no han
sido cubiertas. Igualmente, no parece haber rastro de aquellas 850
plazas que se iban a recuperar haciendo uso del dinero remanente de
aquel Programa de Calidad que, parcialmente, ilegalizara al TSJA,
tras resolver recurso interpuesto por el sindicato CGT.
Por
todo ello, esta misma mañana ya hemos iniciado una serie de acciones
tendentes a denunciar nuestra calamitosa situación, así como las
consecuencias que la misma tiene sobre la salud de uno de los
Sistemas Educativos peor valorado de toda la Unión Europea. En ese
sentido, se acaba de entregar en el registro de la Consejería de
Educación una misiva colectiva recordando a sus dirigentes todas
nuestras reivindicaciones y propuestas, y denunciando que entendemos
que han faltado a su palabra. Acto seguido, diferentes grupos
pertenecientes a las asambleas provinciales de IDA, se han dedicado a
poner en marcha una campaña de sensibilización que nos ha llevado a
visitar a numerosos centros de todo Andalucía, para poder compartir
nuestra problemática con todos los profesores y profesoras que
también están sufriendo las consecuencias de las medidas aplicadas
por la Junta, al cargar con las dos horas de más que han puesto en
la calle a miles y miles de interinos.
En
breve, este colectivo llevará a cabo contundentes movilizaciones de
la naturaleza de las puestas en marcha durante el curso anterior, en
aras a lograr que desde la administración se hagan eco de sus
exigencias. A saber:
1.
Que, para empezar, la CEJA cubra todas y cada una de las jubilaciones
que se han producido, y que considere realmente las 850 plazas
prometidas, de cara a elevar el número de contrataciones.
2.
Que la CEJA asimile las dos horas de la discordia a diversas
actividades docentes, de manera que las mismas puedan ser absorbidas
por los docentes interinos en situación de desempleo.
3.
Que activen todas las medidas que tengan en su haber, ya no de cara a
la cobertura de vacantes, sino a la cobertura de ¨sustituciones
cortas¨. En ese sentido deberían hacer efectivas las sustituciones
justo diez días después de producida la baja -algo que no ocurrió
durante el curso pasado-. Además, podrían contratar al profesorado
interino activo durante el curso anterior, de cara a realizar las
pruebas extraordinarias de septiembre en los centros para los que
trabajaron, no como ocurre ahora, que son profesores funcionarios
diferentes a los que tuvieron los alumnos el curso pasado, que en
muchos casos ni los conocen, los que los evaluarán.
4.
Que en los próximos presupuestos generales se prioricen partidas
presupuestarias destinadas a la contratación de profesorado
interino, prescindiendo para ello, si fuere necesario, de lo que
resta del Plan de Calidad o la AGAEVE.
Porque
mientras que en BOJA sigan figurando 4502 plazas suprimidas, la
Educación Andaluza seguirá estando herida de muerte. Ante esta
perspectiva, nosotros jamás nos quedaremos de brazos cruzados.
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