Se están cargando un derecho fundamental y no podemos
quedarnos parados.
¿Sabes lo que está ocurriendo?
- Pérdida de aulas. Andalucía ha perdido en torno a 2600 aulas (líneas)
desde 2018. Esta tendencia continúa sin freno. La excusa es la baja natalidad,
sin embargo no se cierran líneas en los centros privados-concertados. Sobre todo está ocurriendo en infantil y primaria, pero pronto llegará a secundaria.
- Consecuencias. La pérdida de aulas tiene muchas consecuencias, entre ellas dejar a muchos alumnos sin poder elegir el centro público deseado. El aumento de las ratios (número de alumnos por aula), la reducción del personal docente entre ellos los de refuerzo infantil, la disminución del presupuesto de los centros y la pérdida de ayudas y subvenciones.
- Aulas masificadas. Las altas ratios que se permiten y el aumento de estas
por la eliminación de líneas hace que la calidad educativa disminuya: no se
puede atender al alumnado de forma personalizada.
- Presupuestos europeos devueltos. 119 millones de fondos europeos
devueltos que habrían sido destinados a guarderías públicas. Partidas
presupuestarias aumentadas en la privada-concertada y reducidas en la pública.
- Docentes impartiendo materias distintas a su especialidad: otro
mecanismo que la Junta de Andalucía lleva a cabo en los centros públicos es
obligar a los docentes que impartan materias distintas a su especialidad
ahorrándose la contratación de más docentes con un gran perjuicio en la calidad
de la enseñanza en todos los niveles.
- Excesiva burocracia. Los docentes estamos ahogados con una burocracia
excesiva que no permite dedicar nuestro tiempo a preparar las clases como nos
gustaría en pro de una mejor calidad educativa. Y esto nos resta tiempo de
nuestra conciliación familiar o personal.
- Atención a la diversidad. Faltan orientadores en los centros, figura
crucial para el desarrollo integral del alumnado, y especialistas (PT, AL, ILSE,
PTIS) que permiten la inclusión de muchos alumnos. No se está atendiendo a la
diversidad del alumnado y a sus necesidades educativas porque faltan
especialistas. El alumnado de educación especial está siendo excluido y las familias están desesperadas por no poder llevar a sis hijos a la escuela.
- Bajas sin cubrir. SIPRI no cubre las bajas de los docentes o lo hace varias semanas después de que se produzcan, haciendo que el alumnado esté varias semanas sin docente. Otro mecanismo de ahorro de la Consejería que mantiene a muchos interinos en el paro, con una situación de desamparo y aspirantes sin esperanzas de entrar nunca en la bolsa.
- Interinos de usar y tirar. La Junta de Andalucía no mira por sus trabajadores docentes
interinos a los que no quiere estabilizar de forma justa. Una plantilla estable
supone una mejor calidad educativa. Estos ya han demostrado con creces su
trabajo y valía. Si están en abuso, deben ser estabilizados. Condenados a no
poder conciliar por tener que estar desplazados y muchos en el paro durante
meses.
- Infraestructuras y limpieza. Las infraestructuras de los centros
están deterioradas, lo cual atenta incluso contra la seguridad del alumnado y
los docentes. Algunos centros cierran por mal estado. Todo por la falta de
inversión en la educación pública. Caída de techos, centros que se inundan en
época de lluvias…. Además falta personal de mantenimiento cuya labor es mantener
los centros en unas condiciones higiénicas adecuadas.
- Privatización. La privatización o externalización de muchos servicios
como el comedor escolar o las PTIS, ha supuesto muchos problemas. Subida de
precios de los comedores siendo estos de baja calidad y permitir que estas
empresas privadas tengan parte del personal de integración social (PTIS) en unas
condiciones deplorables, siendo estos profesionales una figura muy importante
para que el alumnado de educación especial pueda ir a la escuela.
- Ley de bioclimatización. Esta Ley aprobada en 2021 no se está cumpliendo
y esto atenta contra la salud del alumnado y los docentes, teniendo que pasar
mucho frío en invierno y soportar elevadas temperaturas incluso desde mayo.
- Falta de plazas en la educación superior: cada vez menos plazas en la FP
o la Universidad. La Junta solo fomenta la FP y las universidades privadas,
atentando contra el derecho a la formación de calidad y creando unas
desigualdades reales en la sociedad. En 5 años crearon 3 universidades privadas
más de la que ya había en 2019 y hay otras dos en proyecto de salida. Mientras
rectores y alumnado de la pública piden la ampliación de facultades y grados, la
Junta de Andalucía le regala a la privada nuevos estudios y planes. Estas
universidades tienen matrículas de 14.000 euros al año (Loyola Andalucía). Igual
pasa con la FP. La Formación Profesional se ha convertido en un negocio para el
PP. Varias empresas educativas, con el apoyo de los consejeros de educación
desde hace 6 años han copado estos estudios, haciéndolos inalcanzables a los
bolsillos de las familias andaluzas. Mientras la FP privada está sufriendo
recortes y eliminando ciclos de muchos institutos andaluces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario