El Gobierno ha impuesto su nueva ley
educativa a pesar de contar con el rechazo de toda la comunidad
educativa y con los únicos apoyos de la
Conferencia Episcopal y el
sector privado. Con la excusa de la mejora de los
resultados ha
perpetrado una reforma reaccionaria, clasista y segregadora que
condena a la exclusión tanto al alumnado con dificultades de
aprendizaje como
al de las clases humildes.
MV se ha opuesto a la LOMCE desde el
principio de manera rotunda a través
multitud de movilizaciones. Y
a pesar de que la ley ya ha sido aprobada, vamos a seguir luchando
contra ella utilizando todos los medios a nuestro alcance.
Aunque a
última hora se ha producido cierto retraso en la implantación de la
ley, el PP quiere que la LOMCE empiece a introducirse en los centros
de
secundaria el próximo curso 2014/15. Y pretende hacerlo
comenzando con la
nueva Formación Profesional Básica.
La F.P. básica es una de las novedades
de esta ley, y como dice el proyecto de decreto que la desarrolla "va
dirigida a alumnado entre 15 y 17 años, que hayan cursado 3o de ESO
o excepcionalmente 2o de ESO, previa
recomendación del equipo
docente de Educación Secundaria Obligatoria, y con
el
consentimiento de los tutores legales".
Se trata de "apartar", desde
2° de la ESO al alumnado con dificultades o de
clases humildes (en
los borradores de la LOMCE se establecía la correlación entre
fracaso escolar y bajo estatus social) con el objetivo de sacarlos
del sistema y convertirlos en mano de obra barata de baja
cualificación.
Además de lo anterior, tienen el objetivo de
maquillar las estadísticas de
fracaso, ya que este alumnado no
tiene que realizar la reválida del final de la secundaria y no
cuenta para las estadísticas de los graduados en secundaria.
Hay que resaltar que este alumnado no
obtiene la titulación en secundaria, por
lo que no puede continuar
normalmente sus estudios de post obligatoria salvo
el acceso a
determinados ciclos formativos de grado medio y con la desventaja de
la falta de formación durante la etapa de FP Básica. Por otro lado,
la
posibilidad formal de obtener el título en secundaria
presentándose por libre a las pruebas para su obtención, con la
preparación durante la etapa de F.P.
Básica, es poco menos que
imposible. Estamos pues, ante la punta de lanza de
la LOMCE, que
pretende imponerse en los centros el próximo curso.
Por todo ello llamamos a toda la
comunidad educativa a que siga plantando cara a la LOMCE oponiéndose
con todas sus fuerzas, y cada cual desde su
sector, negándose a la
implantación de la FP Básica.
Llamamos a los padres y madres a que se
nieguen a que sus hijos sean
segregados en estos ciclos y hagan
valer su opinión para que continúen en la
ESO.
Llamamos al profesorado de los centros
de secundaria a que no se dejen
embaucar y a que se nieguen a que en
sus centros se implante la FP Básica.
NO
A LA LOMCE! !NO A LA F.P. BÁSICA!
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